Hoy jugamos a... Cultos Innombrables: Fundido en Blanco (VIII)

Hoy hemos tenido una sesión cortita, el desenlace de la historia de los documentalistas. En la anterior sesión habían acabado huyendo de forma frenética de la amenaza White. Amy se había tirado al pozo por donde habían llegado, Debrah había sido envenenada sobre un vehículo por el ataque de un kryseig y Myrick buscaba una salida. Tras recibir una buena andanada de disparos White, Amy y Myrick escapan por el pozo, recuperan la pistola del cadáver medio devorado de Stuart —de la cara solo le queda la calavera— e intentan orientarse por el laberinto de cuevas a toda velocidad. Sacando fuerzas de la flaqueza logran dejar atrás al más rápido de los White, Isaiah, pero el ruido alerta a un utugul que les sale al paso. En más de una ocasión la criatura está a punto de cazar a alguno de los documentalistas, pero logran dejarla un poco atrás al atravesar una angostura en una pared, una que ya había ayudado al último superviviente. El utugul se echa atrás cuando los documentalistas llegan a la salida de la cueva, bajo el sol del mediodía.
El camino de regreso se hace penoso: miedo, un calor insoportable, paranoia, enemigos por todas partes. Por la noche llegan de incógnito a casa de Tracy Bush, donde toman un respiro y una ducha. Myrick estaba lleno de sangre tras su lucha con Junior. Piensan un plan para escapar. Primero se les ocurre hacerlo en alguno de los camiones de suministros que llegan al pueblo, pero llegan a la conclusión de que pueden estar conchabados con los White. Al final terminan haciendo autoestop. Para un coche conducido por una pareja de yonquis que les lleva hasta el siguiente punto habitado, a muchos kilómetros del lugar. Estos les intentan robar, pero los documentalistas ya han pasado demasiadas penurias con unos canallas de mayor nivel, así que los ladrones se quedan, digamos, con las ganas. Las últimas imágenes se ven en sepia, la separación de los viejos amigos y el montaje del documental mientras se suceden los créditos y las imágenes de los compañeros caídos.
La sesión acaba en el futuro, con el personaje que había aceptado su linaje White viendo el vídeo en un teléfono móvil cerca de la entrada de la sala superior de la galería de espejos, que está siendo transmitido por uno de sus colegas mientras lo graba. Cuando levanta la vista, una misteriosa mujer le apunta con una pistola, se escucha un click.
Continuará...

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